La Fiscalía ha puesto el foco en la vulnerabilidad de los menores en el entorno digital, resaltando los peligros a los que se exponen y que, en muchos casos, también ejercen de manera creciente. Delitos como el ciberacoso, la sextorsión, el grooming, la usurpación de identidad, el sexting o la pornovenganza se han vuelto cada vez más frecuentes entre los menores de edad en su uso de las redes sociales.
Ante esta preocupante realidad, la Fiscalía ha propuesto una medida clave: retrasar la edad de acceso de los menores a las redes sociales sin supervisión. La institución advierte que la edad a la que los jóvenes acceden a las redes ha disminuido de forma alarmante, aumentando así su vulnerabilidad en el entorno digital. Esta recomendación sigue la línea de otras iniciativas internacionales que buscan proteger a los menores en un espacio cada vez más peligroso.
Delitos Digitales: Menores como Víctimas y Perpetradores
El Ministerio Público subraya que los menores no solo son víctimas de los delitos digitales, sino que en muchas ocasiones también los ejercen. Entre los crímenes que afectan a los jóvenes se encuentran el ciberacoso, que incluye el acoso a través de mensajes o publicaciones, y el grooming, en el que un adulto engaña a un menor con fines de abuso sexual. También destaca la sextorsión y el sexting, que involucra la amenaza o la difusión de material íntimo sin consentimiento, y el deepfake, una forma de suplantación de identidad mediante la manipulación de imágenes y vídeos con inteligencia artificial.
En este sentido, se ha observado un aumento alarmante en el uso de plataformas como Telegram y WhatsApp para la comisión de estos delitos. La facilidad de acceso a redes sociales y aplicaciones de mensajería por parte de los menores expone a una población altamente vulnerable a sufrir daños irreversibles en su intimidad, seguridad y bienestar emocional.
Delitos Digitales: Una Amenaza Creciente para Todos
Aunque los menores están en el centro de estas preocupaciones, la Fiscalía también señala que los delitos digitales afectan a toda la sociedad. Crímenes como las coacciones, amenazas, estafas informáticas, y los delitos contra la intimidad y la libertad sexual son cada vez más frecuentes. Según la memoria anual del Ministerio Público, este tipo de delitos ya se cuentan entre las primeras amenazas para la seguridad individual y colectiva en España.
Entre las nuevas tipologías delictivas emergentes, se encuentran el deepfake, que usa inteligencia artificial para suplantar la identidad de personas mediante la manipulación de imágenes y vídeos, y el ransomware, que implica el secuestro de datos con fines de extorsión. Además, se señala el crecimiento del criptojacking, que consiste en la utilización ilegal de dispositivos ajenos para la minería de criptomonedas.
La Complejidad Creciente de los Ciberdelitos
La Fiscalía advierte que el uso de la inteligencia artificial (IA) está contribuyendo a que los ciberdelitos sean cada vez más complejos y automatizados. Esta tecnología facilita la comisión de delitos a gran escala, lo que hace prever un aumento de los ciberataques a gobiernos y empresas, así como un incremento de fenómenos como la ciberguerra y la desinformación a través de redes sociales, que se perfilan como amenazas emergentes a nivel global.
Medidas Propuestas por la Fiscalía
Con el fin de hacer frente a este escenario cada vez más complejo, la Fiscalía ha propuesto una serie de medidas clave:
- Reforzar la legislación para tipificar adecuadamente los nuevos delitos digitales.
- Fortalecer la ciberseguridad, tanto en instituciones públicas como privadas.
- Impulsar la formación y cooperación judicial para que los operadores del sistema de justicia estén preparados para enfrentar los desafíos del entorno digital.
- Retrasar la edad de acceso a las redes sociales sin supervisión para proteger a los menores de los peligros a los que se exponen en el entorno digital.
La evolución de los ciberdelitos y la velocidad con la que se desarrollan nuevas formas de criminalidad en el entorno digital requieren respuestas rápidas y contundentes. El Ministerio Público ha dejado claro que es imprescindible actuar antes de que las amenazas se materialicen a gran escala.
Nota: Agradecemos el apoyo de la Asociación Nacional de Tasadores y Peritos Judiciales Informáticos (ANTPJI), entidad que con 13 años de experiencia en el ámbito de la ciberseguridad ha resuelto 1.956 casos de violencia digital de género. ANTPJI sigue siendo un referente en la lucha contra los delitos informáticos, ofreciendo formación y peritajes de calidad que ayudan a combatir los peligros del entorno digital.