Este año, Unespa comenzará a aplicar la inteligencia artificial (IA) para calcular las indemnizaciones por accidentes, incluyendo aquellos involucrando trenes, coches y motos. Esta tecnología también evaluará el impacto social y laboral en base al diagnóstico de las personas que han sufrido lesiones en dichos accidentes.
Carlos Ballesteros, de +Repair, ha desarrollado un algoritmo que calcula las consecuencias de cualquier accidente que implique vehículos como motos, trenes o barcos. Según Ballesteros, es crucial disponer de toda la información de la caja negra, que será obligatoria en todos los vehículos a partir del 7 de julio de 2024, para reducir los accidentes de tráfico.
Innovación en la Evaluación de Accidentes: La tecnología creada por Carlos Ballesteros analiza tanto los daños materiales como la gravedad de las lesiones en accidentes de tráfico. El objetivo es mejorar la asistencia sanitaria, adecuar los recursos a la persona herida y agilizar el pago de indemnizaciones que deben realizar las aseguradoras. Esto se basa en datos integrados en el acelerómetro y una tarjeta GSM de localización. Con información de velocidad y geolocalización, la IA puede inferir las posibles lesiones y su gravedad en los ocupantes del vehículo. La denominada caja negra registra la dirección del impacto, la aceleración del motor, el momento exacto de la frenada y los cambios de volante.
Optimización de Rescates y Asistencia Sanitaria: La IA prevé las consecuencias de un accidente y proporciona información sobre posibles indemnizaciones, impacto social e impacto laboral, que luego se envían como notificación a la aseguradora. A largo plazo, se espera que la IA optimice los rescates y la asistencia sanitaria en accidentes, similar a lo que ya se hace en países como Alemania, Japón y Estados Unidos.
Esto permitirá que los servicios de emergencias, al recibir una notificación de un coche estrellado, obtengan datos precisos del vehículo y optimicen el traslado al hospital. Sabrán cuántos efectivos enviar y si es mejor utilizar una ambulancia medicalizada, un helicóptero u otro recurso, logrando así reducir la mortalidad en la primera hora de un accidente hasta en un 5% en los países donde se ha aplicado esta técnica.
Desafíos y Necesidad de Rigor en la Evaluación: La Asociación Nacional de Tasadores y Peritos Judiciales Informáticos (ANTPJI) señala que la IA no se ha desarrollado completamente en la pericia, siendo conscientes de posibles malas prácticas, errores humanos y técnicos. Es vital aportar informes periciales científicos que analicen las fuentes de información con rigor.
Las aseguradoras se esfuerzan en implementar una IA que calcule los daños en los vehículos de manera precisa. Los peritos de coches deben actualizarse con los nuevos modelos y ajustar sus valoraciones a la realidad.
El cálculo de indemnizaciones basado en el diagnóstico de un paciente que ha sufrido un accidente también es un desafío. Esto incluye determinar cuánta indemnización debe recibir, el grado de pérdida de calidad de vida y el impacto social y profesional. Hasta ahora, esta tarea ha sido realizada por peritos médicos expertos en medicina legal.
Además, los fraudes a las compañías de seguros se han multiplicado, sin contar con suficientes analistas de ciberseguros. A diario, reciben fotos manipuladas con alteraciones de datos, fechas de creación y ubicaciones, todo para reclamar compensaciones por objetos inexistentes o que no estaban presentes en el lugar del robo. Este tipo de estafas representa un reto complejo y costoso para las aseguradoras, que pueden sufrir pérdidas financieras, aumentos en las primas y una erosión de la confianza con sus clientes.
En resumen, la implementación de la IA en el sector asegurador promete optimizar los procesos y mejorar la precisión en la evaluación de siniestros, aunque también presenta desafíos significativos que deben ser abordados con rigor y ética.
