La Policía Nacional ha desmantelado una red criminal especializada en estafas en línea, utilizando el método de «phishing bancario» para engañar a sus víctimas. Este engaño implica la suplantación de la identidad de empleados bancarios, dirigido a obtener información personal y financiera de manera fraudulenta. Sorprendentemente, entre los siete arrestados se hallan dos menores, siendo uno de ellos, notablemente habilidoso en informática, el cabecilla del grupo. Este joven se encargaba de diseñar los fraudes y reclutar a individuos para lavar el dinero estafado, ofreciéndoles una parte del botín como comisión.
El juez de menores ha decretado el internamiento de este adolescente en un centro de reforma, bajo régimen cerrado, pendiente de juicio. Este grupo logró apropiarse indebidamente de 26.851 euros mediante su estratagema, afectando a víctimas repartidas por toda España, desde Écija a Madrid y Oviedo. Utilizando datos obtenidos de hackeos a bancos, contactaban a sus víctimas fingiendo ser empleados bancarios, aumentando su credibilidad mediante la manipulación tecnológica de los números de teléfono. Las víctimas eran dirigidas a sitios web falsos donde, creyendo cancelar cargos inexistentes, terminaban autorizando transferencias directamente a los bolsillos de los estafadores.
Para evitar caer en estas trampas, es vital recordar que ningún banco solicitará datos sensibles por teléfono. Se recomienda ser escéptico ante comunicaciones sospechosas, evitando proporcionar información personal o bancaria y no hacer clic en enlaces dudosos. Acceder a la banca en línea debe hacerse siempre a través de medios seguros y verificando la autenticidad de los sitios web. Ante cualquier sospecha, lo más seguro es finalizar la llamada y contactar al banco por medios oficiales.
