Peritos, IA y tribunales. Bienvenidos a la justicia del siglo XXI: En un mundo donde las pruebas son digitales, los delitos se cometen desde algoritmos, y los jueces consultan logs antes que testigos, una figura emerge como pieza clave en la justicia contemporánea: el perito informático.
Pero mientras la inteligencia artificial comienza a redactar informes forenses, y los drones se convierten en testigos presenciales, algunos quieren seguir controlando el acceso a esta nueva justicia con llaves oxidadas: colegiación obligatoria, titulación única, y denuncias sistemáticas contra quienes desafían el status quo.
Caso cerrado: la justicia absuelve (otra vez) a la innovación: El pasado 14 de marzo de 2025, el Juzgado de Instrucción Nº 7 de Sevilla desestimó la denuncia por intrusismo profesional y revelación de secretos interpuesta por el CPITIA contra el perito Manuel Huerta de la Morena, experto acreditado por la ANTPJI.
¿Su “delito”? Firmar un informe pericial en el caso “Marta del Castillo” y comentar su experiencia en medios. ¿El resultado? Otra sentencia más que desmonta el intento de monopolizar la figura del perito judicial.
¿El veredicto?
- No hay intrusismo: no se atribuyó condición de ingeniero técnico ni se falsificó titulación alguna.
- No hay revelación de secretos: los hechos eran ya conocidos y divulgados públicamente.
Lo que hay, según el juez, es una lucha por el control de la categoría profesional, no un delito.
13 sentencias, una verdad innegable: ANTPJI forma, acredita y gana
Con esta, ya son 13 resoluciones judiciales que desestiman denuncias promovidas por el CPITIA contra peritos formados por la ANTPJI.
- 13 veces que la justicia ha dicho que no existe delito.
- 13 veces que se ha protegido el derecho a ejercer por formación y competencia.
- 13 veces que se ha reconocido que ANTPJI no simula títulos, sino que acredita conocimiento técnico con base en derecho.
La batalla del conocimiento: ¿quién decide quién es perito?
La sentencia lo deja claro: “Ambas partes están inmersas en una lucha por conseguir ante los tribunales una declaración de aptitud profesional”.
Pero el tiempo de las “corporaciones gremiales” ha pasado.
En 2025, lo que importa no es el sello del colegio, sino:
- ¿Puedes demostrar competencia técnica?
- ¿Tu informe soporta el juicio de un tribunal?
- ¿Tu procedimiento sigue cadena de custodia digital?
Si la respuesta es sí, entonces eres perito. Punto.
ANTPJI: una central de justicia digital autónoma, ética y con visión de futuro
La Asociación Nacional de Tasadores y Peritos Judiciales Informáticos (ANTPJI) no se limita a formar peritos.
Está diseñando la infraestructura técnica, ética y legal de la justicia digital del mañana.
Su trabajo incluye:
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- IA forense aplicada: algoritmos para detección de fraude, análisis de metadatos y reconstrucción de incidentes digitales.
- Cadena de custodia digital: protocolo creado por ANTPJI, hoy aceptado por tribunales de toda España.
- Drones periciales y robótica jurídica: intervención técnica en siniestros, inspección aérea y reconstrucciones automatizadas.
- Formación internacional: acuerdos con universidades en España, México, Argentina y Reino Unido.
Ciencia ficción hecha jurisprudencia.
Parece guion de cine, pero es realidad legal:
- Peritos que reconstruyen delitos informáticos usando simulaciones con IA.
- Robots autónomos que documentan pruebas físicas y envían reportes cifrados.
- Algoritmos entrenados para detectar deepfakes, manipulación de voz y falsificación de documentos digitales.
- Informes periciales blockchain-locked, verificables públicamente sin necesidad de comparecencia.
La Justicia se adapta al siglo XXI y la ANTPJI ya está implementando.
Cuando los colegios se enfrentan al algoritmo
La resistencia del CPITIA, encabezada por Pedro de la Torre, ha pasado de lo jurídico a lo casi narrativo. Doce (ahora trece) denuncias, todas sin éxito. Argumentos sin peso. Acusaciones sin pruebas. Y sobre todo, una negativa sistemática a aceptar que la competencia no se hereda por estatuto: se gana en los juzgados.
¿Qué nos enseñan estas sentencias?
- Que la legitimidad profesional no se decreta: se acredita.
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- Que la justicia respeta la competencia técnica, aunque no guste a los monopolios.
- Que ANTPJI representa un modelo profesional basado en conocimiento real, validación judicial y compromiso ético y así lo demuestra su trayectoria intachable en los Tribunales, tanto en España, como en el extranjero
El código ha ganado al sello: En la justicia del siglo XXI, no basta con tener un título. Hay que saber programar la prueba, custodiarla digitalmente, demostrarla ante jueces, y defenderla ante ataques que ya no vienen solo de abogados… sino de bots, inteligencias artificiales y medios manipulados.
Y ahí es donde la ANTPJI está marcando la diferencia: formando peritos que no solo entienden la ley, sino que la traducen al lenguaje de la tecnología.
En un mundo cada vez más complejo, donde los delitos se esconden tras redes cifradas y las pruebas viajan en forma de paquetes digitales, los nuevos héroes judiciales no llevan toga. Llevan software forense.
- Y no necesitan el permiso de ningún colegio para ejercer. Solo necesitan lo que la ANTPJI ya les da: formación, legitimidad… y jurisprudencia a favor.
- Porque en ANTPJI lo sabemos bien: el conocimiento no se monopoliza. Se demuestra. Se acredita. Y se defiende.
- Con la ANTPJI: Nunca volverás a caminar solo.
