La Agencia Tributaria ha elevado la vigilancia sobre ciertos autónomos durante este verano 2025, especialmente aquellos cuyo estilo de vida exhibido en redes sociales y otros canales no se corresponde con los ingresos que declaran oficialmente. Esta medida, recogida en el Plan Anual de Control Tributario y Aduanero, se apoya en avanzadas tecnologías como el big data, la inteligencia artificial (IA) y el cruce masivo de información.
El foco en los signos externos de riqueza y vacaciones exhibidas online. Para Hacienda, simplemente presumir en Instagram o TikTok de unas vacaciones en destinos exóticos como las islas griegas o de propiedades caras, sin que esos gastos puedan justificarse con las rentas declaradas, es un indicador claro de posible fraude fiscal.
Esto no es una sospecha infundada: los sistemas cruzan datos financieros, registros oficiales y publicaciones públicas para buscar discordancias entre ingresos declarados y nivel de vida exhibido. Si los algoritmos detectan gastos o consumos desproporcionados en relación a los ingresos fiscales, saltan las alarmas.
Como ejemplo, un autónomo que declara ingresos anuales bajos (por ejemplo 10.000 euros) pero muestra movimientos bancarios o gastos que superan varias veces esa cifra, o que publica fotos en redes luciendo lujos o viajes caros, está en el punto de mira.
La Agencia Tributaria utiliza desde hace años sistemas informáticos potentes capaces de procesar y analizar millones de datos simultáneamente. La incorporación de inteligencia artificial además permite reconocer patrones anómalos o indicios de fraude con una rapidez y precisión superiores.
Los datos usados no se limitan a movimientos bancarios o propiedades, sino que incluyen:
- Extractos bancarios y operaciones en efectivo (que tienen límite legal: más de 1.000 euros en efectivo en una sola operación puede alertar).
- Registros de propiedad, vehículos y otros activos económicos.
- Datos de consumo energético (agua, luz, gas) para definir la residencia habitual.
- Publicaciones públicas en redes sociales que reflejen un nivel de vida elevado.
- Datos de ventas o ingresos declarados en plataformas digitales y marketplaces.
El cruce conjunto de estas fuentes alimenta el sistema automatizado que señala riesgos fiscales, los cuales luego son revisados por inspectores humanos.
Redes sociales: el escaparate vigilado por Hacienda
No se trata de un espionaje a la privacidad personal ni de revisar comunicaciones privadas (como mensajes de WhatsApp), sino del análisis de perfiles públicos en redes sociales donde los autónomos exhiben fotos, eventos, propiedades o estilo de vida.
Tal como explica José María Peláez, portavoz de la Asociación de Inspectores de Hacienda, el sistema no busca controlar la vida privada específica, sino identificar posibles “discordancias” evidentes entre el nivel de vida que se muestra y la base tributaria declarada.
Ejemplos tan comunes como presumir de un piso en Marbella o unas vacaciones de lujo pueden activar la alerta si esos gastos no se reflejan en la declaración de la renta.
Consejos para autónomos: cómo evitar problemas y actuar con transparencia
- Sinceridad en la declaración de ingresos: Mantener actualizados los datos fiscales, evitando omisiones o errores.
- Guardar justificantes y facturas: Documentando gastos y adquisiciones importantes para acreditar su origen legal y compatible con la actividad económica.
- Planificar vacaciones y gastos sin incoherencias: Reflexionar si el nivel de vida exhibido se ajusta realmente a la capacidad económica declarada.
- Solicitar “vacaciones fiscales”: La Agencia permite que los autónomos elijan hasta 30 días al año para no recibir notificaciones electrónicas y desconectar sin riesgo de sanciones por falta de respuesta.
- Usar asesoría profesional: En casos dudosos, recibir asesoramiento fiscal para ajustar cuentas y evitar problemas legales.
El sistema no es un “big brother” indiscriminado, sino un mecanismo para garantizar que todos los contribuyentes cumplan con sus obligaciones y que se evite el fraude fiscal, que afecta a la sostenibilidad del sistema.
El uso avanzado de IA y big data supone una evolución natural para adaptar la vigilancia a la complejidad actual, donde ocultar ingresos o gastos es cada vez más difícil ante la transparencia digital y la interconexión de datos.
En 2025, Hacienda refuerza la vigilancia sobre algunos autónomos que exhiben un nivel de vida que no pueden justificar fiscalmente, con especial atención a sus publicaciones en redes sociales y movimientos financieros. Esto obliga a una gestión más cuidadosa y responsable de la vida pública y financiera.
Estar informado, planificar y actuar con transparencia es la mejor forma de evitar problemas con la Agencia Tributaria y garantizar que las “vacaciones” sean solo un merecido descanso, no un motivo de inspección o sanción.