Podemos se enfrenta a un ciberataque devastador que ha resultado en la filtración de datos personales de sus inscritos y la exposición de información crucial sobre su gestión económica. La situación está siendo investigada minuciosamente por el Grupo de Investigación Tecnológica de la Brigada de Policía Judicial de Madrid.
El origen del ataque, inicialmente enmascarado por una dirección IP en Moldavia, ha revelado una maniobra calculada para ocultar la verdadera fuente del hackeo. Además de la fuga de datos, se ha denunciado la sustracción de documentación relacionada con la gestión financiera del partido.
El incidente, ocurrido a mediados de marzo según informes del partido, ha permitido a los atacantes obtener aproximadamente 30 de gigabytes de información confidencial, incluyendo nombres, apellidos, números de DNI, teléfonos y direcciones de los afiliados. Los presuntos autores del ataque han presumido de sus acciones en la dark web.
Podemos ha informado del robo de datos a la Agencia Española de Protección de Datos. Sin embargo, la documentación sustraída no parece tener relación con asuntos políticos o de estrategia, y aún se desconoce el motivo y el destino final de los datos robados.
Los perpetradores del ciberataque, quienes admitieron su acción en un foro de la Internet oscura, aseguran haber accedido a información sensible almacenada en un disco duro de 30 GB perteneciente a la formación morada. Subrayan que el dominio pode.ms está vinculado al sitio oficial Podemos.info.
Es importante destacar que los datos robados suelen ser vendidos en mercados oscuros, donde terceros los utilizan para realizar estafas, generar contratos telefónicos fraudulentos e incluso obtener tarjetas de crédito mediante la suplantación de identidad.
