martes, junio 17, 2025
Publicidad
Publicidad

Chema Alonso y Telefónica: De la Innovación al Declive Tecnológico

Las opiniones expresadas en esta publicación son responsabilidad exclusiva de quien lo firma y no reflejan necesariamente la postura de TecFuturo. Asimismo, Tec Futuro no se hace responsable del contenido de las imágenes o materiales gráficos aportados por los autores.
Publicidad

En 2016, Telefónica sorprendió al sector tecnológico al incorporar a Chema Alonso, reconocido hacker y experto en ciberseguridad, como Chief Data Officer (CDO). La intención era clara: modernizar la compañía y situarla a la vanguardia de la transformación digital. Sin embargo, tras casi una década, la relación entre Alonso y la multinacional española parece llegar a su fin, marcada por una serie de proyectos que no alcanzaron las expectativas.

La Cuarta Plataforma: Una Visión Ambiciosa que No Despegó

Uno de los proyectos más emblemáticos liderados por Alonso fue la denominada «Cuarta Plataforma». Presentada en 2016, esta iniciativa buscaba otorgar a los clientes el control sobre sus datos personales, permitiéndoles decidir qué información compartir y con quién. La propuesta incluía la posibilidad de que los usuarios pudieran negociar directamente con gigantes tecnológicos como WhatsApp, Facebook o Google sobre el uso de sus datos. Aunque la idea era innovadora, su implementación resultó compleja y no logró materializarse de manera efectiva. Además, generó problemas técnicos internos que retrasaron otros proyectos y provocaron malestar en diversas unidades de negocio de Telefónica.

Aura: El Asistente Virtual que No Conquistó a los Usuarios

En 2018, Telefónica lanzó Aura, un asistente virtual basado en inteligencia artificial que prometía revolucionar la interacción de los usuarios con los servicios de la compañía. Disponible en países como Argentina, Brasil, Chile, Alemania, España y Reino Unido, Aura permitía a los clientes consultar información sobre sus facturas, servicios contratados y otros contenidos mediante comandos de voz. Sin embargo, las funcionalidades limitadas y la falta de valor agregadas en comparación con otros canales existentes hicieron que Aura no alcanzara la adopción esperada. A pesar de las intensas campañas publicitarias, solo unos pocos kilómetros de usuarios, de los más de 300 millones que posee Telefónica, utilizaron el servicio de manera regular.

Movistar Home: Un Dispositivo sin Mercado

Siguiendo la línea de innovación, en 2018 se presentó Movistar Home, un dispositivo que integraba a Aura y ofrecía funciones como videollamadas, reproducción de música y gestión de rutinas domésticas. Con un precio inicial de 79 euros, el dispositivo no logró captar el interés del público, que ya contaba con alternativas más completas y económicas en el mercado. Ni siquiera promociones especiales o la participación de figuras mediáticas como Rafa Nadal lograron impulsar sus ventas. Finalmente, Movistar Home fue descontinuado, sumándose a la lista de proyectos fallidos de la compañía.

Publicidad

Open Gateway: Una Promesa Aún por Cumplir

En el Mobile World Congress de 2023, Telefónica anunció Open Gateway, una iniciativa para compartir y federar APIs abiertas con el objetivo de proporcionar acceso interoperable a las redes de los operadores para desarrolladores y empresas. Aunque se proyectaron ingresos superiores a los 1.000 millones de euros, hasta la fecha, el proyecto no ha generado los resultados esperados y ha sido recibido con escepticismo tanto dentro como fuera de la compañía.

Un Cambio en la Cúpula Directiva

La llegada de Marc Murtra a la presidencia de Telefónica ha traído consigo una reestructuración en la cúpula directiva. En este contexto, la posición de Chema Alonso se ha visto comprometida debido a los resultados de sus proyectos ya la necesidad de la compañía de reenfocar su estrategia tecnológica. A pesar de haber sido una figura destacada y mediática dentro de Telefónica, su continuidad en la empresa parece llegar a su fin.

La trayectoria de Chema Alonso en Telefónica refleja los desafíos que enfrentan las grandes corporaciones al intentar innovar y adaptarse a un entorno tecnológico en constante evolución. Aunque las iniciativas lideradas por Alonso tenían objetivos loables y buscaban posicionar a Telefónica como líder en transformación digital, la ejecución y aceptación por parte del mercado no fueron las esperadas. Este caso subraya la importancia de alinear la visión innovadora con las necesidades reales de los usuarios y las capacidades operativas de la empresa.

El futuro de Telefónica dependerá de su capacidad para aprender de estos desafíos y adaptar su estrategia para seguir siendo relevante en un mercado cada vez más competitivo y orientado al cliente.

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Suscríbete a nuestro Boletín

Regístrate para recibir contenido interesante en tu bandeja de entrada, cada semana.

¡No hacemos spam! Lee nuestra política de privacidad para obtener más información.

Lo más leido