La Unión Europea ha desmentido que su decisión de retirar la Directiva de Responsabilidad en IA, una ley de 2022 que buscaba facilitar demandas contra daños causados por productos y servicios con IA, haya sido consecuencia de presiones de la administración Trump.
En una entrevista con el Financial Times, Henna Virkkunen, jefa digital de la UE, afirmó que la propuesta se ha descartado para reducir la burocracia y fomentar la competitividad en el sector tecnológico europeo. En su lugar, la UE centrará sus esfuerzos en un código de prácticas de IA, vinculado a la Ley de IA de la UE, que limitará los requisitos de reporte a lo ya estipulado en las normativas actuales.
Por otro lado, el martes, el vicepresidente de EE.UU., JD Vance, instó a los legisladores europeos a reconsiderar su enfoque regulador y adoptar una postura más abierta hacia la «oportunidad de la IA», durante su discurso en la cumbre Paris AI Action Summit.
Curiosamente, al día siguiente del discurso de Vance, la Comisión Europea publicó su programa de trabajo para 2025, promoviendo una Unión «más audaz, simple y rápida». En este documento, se confirmó la eliminación de la Directiva de Responsabilidad en IA y se anunciaron nuevas estrategias para impulsar el desarrollo y adopción de IA en la región.