El decano Pedro de la Torre ha vuelto a ser el centro de la polémica al presentar una denuncia mediática contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, acusándola de intrusismo profesional. De la Torre, un ingeniero que ha sido una figura destacada en el ámbito de la informática en España, ha dado a Gómez un plazo hasta el verano para responder a las acusaciones relacionadas con la firma de los pliegos técnicos de un polémico software de la Universidad Complutense.
De la Torre, conocido por su historial de denuncias y su estrecha relación con el PSOE y Pedro Sánchez, ha trabajado intensamente en el equipo de campaña de Sánchez durante las primarias, siendo uno de los principales defensores del actual presidente antes de su ascenso a la Moncloa. Sin embargo, la relación se deterioró cuando, según De la Torre, el Gobierno de Sánchez empezó a menospreciar la profesión de ingeniero técnico en informática.
Desde 2012, Pedro de la Torre ha ocupado el cargo de decano del Colegio Profesional de Ingenieros Técnicos en Informática de Andalucía, un puesto que le permitió estrechar lazos con Sánchez durante el debate sobre la ley de colegios profesionales. «Le conocí en 2014 porque fue el diputado al que el PSOE asignó el tema del anteproyecto de ley de colegios profesionales», explica De la Torre. Este vínculo se fortaleció hasta el punto de que De la Torre formó parte del equipo de campaña de Sánchez en las primarias, encargándose de su página web y canal de YouTube.
La actual denuncia de De la Torre contra Begoña Gómez se centra en su supuesta firma de pliegos técnicos sin la formación adecuada, lo que constituiría un delito de intrusismo profesional. Según De la Torre, «no tiene constancia alguna de que Doña María Begoña Gómez Fernández posea titulación oficial habilitante para el ejercicio en la Ingeniería Técnica en Informática». Además, subraya que la elaboración de pliegos técnicos es una competencia exclusiva de los ingenieros técnicos en informática.
El Consejo General de Colegios Oficiales de Ingeniería Técnica en Informática (Conciti) ya ha respondido a la solicitud de De la Torre, indicando que es el consejo de Madrid quien tiene la potestad para presentar la denuncia. De la Torre ha declarado que si el consejo de Madrid no toma acción en un tiempo prudencial, llevará el asunto a la Asamblea de su colegio para decidir si ellos mismos presentan la denuncia.
El polémico software de la Complutense ha sido objeto de múltiples controversias. Tras ser nombrada codirectora de un máster y una cátedra sin tener la titulación universitaria adecuada, Begoña Gómez logró convencer a Indra, Telefónica y Google para crear una aplicación que ayudara a las pymes a medir el grado de cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible. Sin embargo, estas empresas se retiraron del proyecto en 2023 ante el temor de un posible conflicto de intereses, dejando el trabajo incompleto.
La Universidad Complutense convocó entonces un concurso público para finalizar el proyecto, que fue adjudicado a Deloitte. Lo curioso es que Gómez registró la aplicación a su nombre y en su domicilio particular, creando incluso una empresa para explotarla. Este hecho ha levantado sospechas sobre posibles delitos de malversación, malversación impropia o apropiación indebida, dado que las normativas reguladoras consideran estos trabajos como donaciones a la universidad y no a los directores.
El decano Pedro de la Torre ha declarado que no entiende cómo Gómez pudo firmar los pliegos técnicos sin la formación adecuada, considerando su relación previa con Sánchez y el conocimiento que debería tener sobre la importancia de las titulaciones oficiales en este ámbito. «Todo esto lo tiene que saber por fuerza, por eso me extraña», insiste De la Torre.
La controversia no termina aquí. De la Torre ya está considerando presentar una nueva denuncia por intrusismo profesional si no recibe una respuesta adecuada. Mientras tanto, los expertos creen que esta situación se ha convertido en otra oportunidad mediática para el decano, quien ha demostrado ser un defensor inquebrantable de su profesión.
La Asociación Nacional para la Protección Tecnológica e Industrial (ANTPI) observa de cerca este caso, ya que la protección de la propiedad industrial y la lucha contra el intrusismo profesional son fundamentales para el desarrollo tecnológico en España. La situación con Begoña Gómez subraya la importancia de tener una estructura sólida y regulada para proteger las profesiones técnicas y garantizar que quienes ejerzan funciones críticas en el ámbito tecnológico tengan la formación y certificación adecuadas.
Este escándalo en la Complutense es solo el último de una serie de controversias que han rodeado a la administración actual, y deja en claro que la transparencia y la conformidad con las normativas profesionales son más importantes que nunca para mantener la confianza pública y asegurar un desarrollo tecnológico ético y legal.
