En un mundo donde la tecnología avanza más rápido que la legislación, la protección de los neuroderechos emerge como una prioridad ética y jurídica inaplazable. El pasado 28 de abril, en el Auditorio Meeting Place en Madrid, Emilia Zaballos, prestigiosa abogada y firme defensora de las libertades fundamentales y presidenta de la Fundación Zaballos, inauguró el evento «Los Neuroderechos a Debate», subrayando la importancia de abordar los neuroderechos desde perspectivas científicas, éticas y legales. El evento reunió a expertos del ámbito jurídico, científico y ético para abordar los desafíos que plantea la neurotecnología. Una cita imprescindible donde se reflexionó sobre la necesidad urgente de regular la manipulación de la mente humana y salvaguardar la privacidad más íntima: la de nuestros pensamientos.
Pregunta: Desde su experiencia como abogada y presidenta de la Fundación Zaballos, ¿qué implicaciones legales y éticas ve más urgentes de abordar en relación a las nuevas neurotecnologías?
La regulación debe ser, no solamente a nivel estatal o a nivel de regulaciones internas o de pequeños gobiernos, sino que debe ser a nivel internacional. No se debe quedar solamente en modificaciones constitucionales, sino a nivel de derechos humanos. Estamos hablando de la información que hay en la mente y en el cerebro humano, es un derecho humano a proteger y que la vulneración de ello debe implicar una serie de consecuencias. Cuando todos los avances científicos, neurotecnológicos están avanzando con el fin de poder mejorar la calidad y la vida el ser humano y si esto se utiliza de manera inconsciente o con otras finalidades como puede ser la manipulación, evitar el libre albedrío y ese tipo de consecuencias que es incluso asaltando la privacidad que el ser humano tiene.
Pregunta: ¿Considera que el actual marco jurídico nacional e internacional está preparado para proteger adecuadamente los neuroderechos o estamos ante un vacío legal que requiere una acción inmediata?
Estamos ahora mismo en una fase de inicio, dónde, desde el 2013 se está concienciando de la regulación a la sociedad, sobre todo en los países latinoamericanos y Estados Unidos, que van por delante de todos nosotros. Por ejemplo, Chile que fue uno de los pioneros desde el 2015, ya tiene hecha una enmienda a la constitución, sin embargo, todos los demás países tienen pequeñas regulaciones, pero no hay ni una enmienda en la constitución donde se recoja como un derecho humano a proteger la información que hay en el cerebro y la mente humana. Necesitamos regularlo a nivel internacional y llevarlo a todos los países mediante esa incorporación por enmiendas a las constituciones y después hacer un desarrollo práctico que se ajuste a la realidad para que puedan realmente ejercer acciones si se vulneran los derechos humanos.
Pregunta: ¿Qué riesgos concretos visualiza, si no se legisla a tiempo la protección de la identidad mental y la privacidad neuronal de los ciudadanos?
Si la tecnología sigue avanzando con la agilidad y la rapidez que se está haciendo a nivel mundial y no se regula esto de forma internacional, los riesgos son tremendos porque podemos influir en la toma de decisiones de las personas, podemos manipular sus pensamientos, sus recuerdos, su forma de ver la vida, incluso en su biología. Si nosotros llegamos a los extremos, podríamos, incluso, no solamente estar manipulando al ser humano y hacer seres humanos que no puedan tomar decisiones desde la libertad y ese libre albedrío, sino, que estén influenciados por terceras personas que pueden manejar las máquinas o la inteligencia artificial o esos aparatos a los que el ser humano va a estar conectado, de tal manera que pueden influir en todas las tomas de decisiones, y el riesgo que hay, es que podríamos hacer seres humanos a la medida de las personas que manejen estos medios. Y otra de las cosas que es importante mencionar, es que podemos generar una diferencia todavía mucho más entre las clases sociales, es decir, las personas que tienen un poder adquisitivo mucho más alto podrían someterse a este tipo de mejoras tecnológicas y desarrollar capacidades que otros no tienen y estaríamos generando más diferencia entre los seres humanos más pobres y los más ricos, con lo cual estaríamos generando un muchísimo más conflicto entre pobreza, riqueza y quién manejaría el mundo y qué no.
Pregunta: ¿Cree que en un futuro cercano será necesario crear tribunales o mecanismos judiciales especializados en la protección de derechos cognitivos y neuronales?
Para mí es fundamental la implicación y el comportamiento por activo de abogados, de jueces, de fiscales, o sea, no solamente hay que regular, sino también hay que fiscalizar si después de eso, las leyes se cumplen y hay que ser contundentes y ejemplarizantes con las sentencias que se dicten, el cumplimiento de las mismas y son condenatorias por el mal uso. Con lo cual hay que crear siempre profesionales a todos los niveles y dentro de los diferentes estamentos de la justicia, tanto a nivel de juzgados normales de primera instancia, como los juzgados superiores, como a nivel de tribunales constitucionales que defiendan y protejan nuestros derechos para caso de vulneraciones de los mismos.